Las manos revelan algo más que gestos y emociones, también anuncian nuestra edad. El proceso de envejecimiento es más apreciable en las manos ya que con el paso del tiempo la piel tiende a hacerse más fina y laxa y estructuras como huesos y venas se hacen más prominentes dando lugar a un aspecto envejecido.
Consiste en un tratamiento rápido y cómodo. Es ideal tanto para manos jóvenes como para aquellas más envejecidas, ya que aporta vitalidad y redensifica la piel. La piel mejora su textura, suavidad al tacto, tono e hidratación. Es un tratamiento con resultados inmediatos, efectivo y seguro, que rellena la piel del dorso de las manos y estimula la producción propia de colágeno.
El producto que se utiliza es la hidroxiapatita cálcica. Aplicandolo mediante pequeñas microinyecciones con agujas de un diámetro muy pequeño apenas es molesto para el paciente.
Realizado el tratamiento, puede notar alguna reacción común relacionada con la inyección como inflamación, dolor, picor, hematoma, decoloración y molestias en el lugar de la inyección. Estas reacciones desaparecerán en poco tiempo (horas o días) dependiendo del tipo de piel de cada paciente.
Puede realizarse en todo tipo de pacientes y edades que precisen de un rejuvenecimiento de las manos, pero hay que tener en cuenta que edades más avanzadas precisarán más de un tratamiento para obtener mejores resultados.
El tratamiento tiene escasas contraindicaciones, como pudieran ser infecciones en la piel, embarazo, lactancia, alergia a algún principio activo.
Es posible combinar el tratamiento con otros como la LUZ PULSADA.
La Luz Pulsada Lumenis actua sobre las manchas antiestéticas (lesiones pigmentadas benignas como léntigos, queratosis seborréicas, manchas café con leche, efélides y discromías), debidas a causas hereditarias, medicación, embarazo, o factores medioambientales.
La energia selectiva de la Luz Pulsada Lumenis funciona como una luz que calienta la melanina de la lesión y provoca su fragmentación. Los fragmentos de melanina de absorben después, y se eliminan. La energía aplicada a la piel es mediante suaves y eficaces pulsos de luz.
Antes de aplicar los pulsos de luz, se extiende un gel frío sobre el área a tratar, y después el médico libera los pulsos de la zona elegida.Durante los tratamientos los pacientes sienten leves o nulas molestias y pueden reanudar inmediatamente sus actividades.
Para obtener los mejores resultados es necesario repetir las sesiones de Luz Pulsada Lumenis.